Ignacio Burgoa Orihuela
Consejero Emérito
In Memoriam
Es difícil hablar del maestro Ignacio Burgoa. Pretender vaciar en esta página su curriculum es una tarea imposible.
Nos basta decir que se ganó a pulso su fama de “Conciencia Jurídica de la Nación”, al ser, por mucho, el jurista mexicano más brillante del siglo XX.
Juez de Distrito, escritor, ensayista, conferencista, litigante implacable, doctor en Derecho, catedrático de casi 60 generaciones de abogados en licenciatura y posgrado, maestro emérito de la UNAM, autor de los libros más completos y consultados de México sobre Derecho Constitucional, Garantías Individuales y Juicio de Amparo, el maestro Burgoa será recordado siempre por su vida y por su obra.
Pero lo más importante que puede decirse de él es que fue un hombre valiente y bondadoso. El amor que dio a su familia, a sus amigos, y a propios y a extraños, le hicieron ganarse el respeto y el cariño del país entero. No fue sólo un hombre reconocido como el mejor entre sus pares. Fue un hombre que lo mismo hacía temblar a presidentes que sonreír a campesinos.
El maestro nació el 13 de marzo de 1918 y falleció el 6 de noviembre de 2005, a los 87 años.
Guardamos con gran cariño su memoria. Simplemente Bufete Jurídico Nacional no existiría sin su generosidad.
Ignacio Burgoa Orihuela
Consejero Emérito
In Memoriam
Es difícil hablar del maestro Ignacio Burgoa. Pretender vaciar en esta página su curriculum es una tarea imposible.
Nos basta decir que se ganó a pulso su fama de “Conciencia Jurídica de la Nación”, al ser, por mucho, el jurista mexicano más brillante del siglo XX.
Juez de Distrito, escritor, ensayista, conferencista, litigante implacable, doctor en Derecho, catedrático de casi 60 generaciones de abogados en licenciatura y posgrado, maestro emérito de la UNAM, autor de los libros más completos y consultados de México sobre Derecho Constitucional, Garantías Individuales y Juicio de Amparo, el maestro Burgoa será recordado siempre por su vida y por su obra.
Pero lo más importante que puede decirse de él es que fue un hombre valiente y bondadoso. El amor que dio a su familia, a sus amigos, y a propios y a extraños, le hicieron ganarse el respeto y el cariño del país entero. No fue sólo un hombre reconocido como el mejor entre sus pares. Fue un hombre que lo mismo hacía temblar a presidentes que sonreír a campesinos.
El maestro nació el 13 de marzo de 1918 y falleció el 6 de noviembre de 2005, a los 87 años.
Guardamos con gran cariño su memoria. Simplemente Bufete Jurídico Nacional no existiría sin su generosidad.